En el 41º Congreso Federal del PSOE, celebrado en Sevilla entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre de 2024, el partido ha aprobado una controvertida enmienda que elimina la ‘Q+’ de las siglas LGTBIQ+, lo que ha desatado críticas tanto de sus socios de gobierno como de organizaciones LGTBI+. La decisión, impulsada por sectores feministas del partido, busca suprimir el término queer -el paraguas que cubre las orientaciones sexuales o identidades de género más allá de lesbianas, gays y transexuales-, considerándolo «misógino, ultraliberal y antifeminista».
Sumar, socio de coalición del PSOE, reaccionó enérgicamente ante esta decisión: «La lucha por los derechos no puede dejar a nadie atrás. No se lucha contra la extrema derecha con las ideas de la extrema derecha«, manifestaron en redes sociales.
Asimismo, Irene Montero, eurodiputada de Podemos y exministra de Igualdad, calificó la decisión de «transfobia». En una publicación en X, afirmó: «Una mujer trans es una mujer. Lo demás es transfobia, aunque lo diga el PSOE». Poco después, publicó un vídeo más extenso en el que aseguró que «las mujeres trans son mujeres, tengan pene o tengan vagina» y que los derechos de las personas trans «son derechos humanos».
Denuncia de colectivos LGTBIQ+
Por su parte, la Federación Estatal LGTBI+ también expresó su profundo pesar por lo que consideran un mensaje de exclusión en un contexto de aumento de discursos de odio y delitos contra el colectivo. Paula Iglesias, presidenta de la Federación, advirtió: «El lenguaje es una herramienta poderosa. Ignorar realidades como las identidades queer envía un mensaje peligroso de exclusión».
Además, la Federación mostró su preocupación por la posible exclusión de las personas trans en el deporte, debido a la ambigüedad del texto aprobado. Según Iglesias, la medida contradice principios de la Ley 4/2023, que protege la igualdad de trato y no discriminación en actividades deportivas.
En la misma línea, la Asociación de Madres y Padres contra la Intolerancia por Género (AMPGYL) calificó la medida como un retroceso. Según su presidente, José Mellinas, «las siglas LGTBIQA+ representan las identidades de miles de personas. Eliminarlas aumenta la vulnerabilidad del colectivo en un contexto de crecientes crímenes de odio».
De igual forma, Mellinas recalcó que en la asociación les parece «preocupante» que algunas voces, incluso desde posiciones que históricamente habían defendido los derechos humanos, presenten discursos que «caricaturizan o banalizan» sus reivindicaciones.