La campaña de la renta en España ha comenzado y las personas contribuyentes podrán hacer su declaración hasta el próximo 1 de julio. El pasado año, más de 12 millones de personas marcaron la casilla 106 de Actividades de Interés Social o la «X Solidaria» ayudando a aquellos colectivos en situación de vulnerabilidad a seguir adelante.
Como cada año, las organizaciones y entidades sociales se han reunido para iniciar la campaña de la renta y hacer un llamamiento a todas las personas contribuyentes para que marquen la «X Solidaria» en su declaración. Con este sencillo gesto «que no cuesta nada pero que vale mucho», según ha expresado María del Mar Pageo, presidenta de Cruz Roja, las personas destinan un 0,7% de sus impuestos a proyectos sociales sin coste económico para ellas. El pasado año se recaudaron más de 475 millones de euros para beneficio de las más vulnerables.
En España actualmente hay un 47% de personas que no marcan la casilla en su renta. Según indica Yolanda Besteiro, presidenta de la Plataforma de ONG de Acción Social, «seguramente sea porque desconocen que no les cuesta nada: ni pagan más ni les devuelven menos«. En este sentido, Luciano Poyato, presidente de la Plataforma del Tercer Sector ha destacado que se trata de «una de las mejores herramientas para canalizar la solidaridad ciudadana«.
Testimonio de tres mujeres beneficiarias
Gracias a la «X Solidaria», mujeres como Claudia, Ramona y Noemí pudieron recibir la ayuda necesaria para tener una mejor calidad de vida. En el caso de Claudia Pérez, víctima de violencia de género, pudo reencontrarse consigo misma y recuperarse física y mentalmente. Fue posible a través del programa Punto de Atención Integral para Mujeres Víctimas de Violencia de Género y sus hijas e hijos en situación de vulnerabilidad social de Movimiento por la Paz.
Ramona Campos, beneficiaria de 87 años del programa TIC y Mayores: Generación de buenas prácticas para el bienestar de las personas mayores de Fundación Esplai Ciudadanía Comprometida asegura que gracias a este proyecto ha podido combatir la soledad no deseada al aprender a utilizar las nuevas tecnologías y herramientas de comunicación como el teléfono y las videollamadas. Además, ha mencionado que hace uso del asistente virtual Alexa: «Me ayuda mientras estoy pintando, hace que no piense en las tristezas de la vida».
Por su parte, Noemí González ha podido crear su propia empresa gracias al programa Acceder: promoviendo el empleo de la comunidad gitana de la Fundación Secretariado Gitano (FSG). «Ser mujer, ser gitana y querer ser empresaria son los obstáculos más grandes que me ha costado superar, porque es complicado nacer mujer gitana, haber sufrido anteriormente de racismo y de rechazo», ha confesado. Luego, ha añadido: «Por desgracia no todos tenemos las mismas oportunidades y necesitamos de ese gesto para que sean iguales para todas las personas».