Hablar de cuidados paliativos es abrazar un enfoque interdisciplinario que busca aliviar el dolor y los síntomas, mejorar la calidad de vida y brindar apoyo emocional y espiritual tanto a la persona enferma como a la familia. Se trata de cuidados que pueden iniciarse en cualquier etapa de una enfermedad grave, no solo tienen por qué tener lugar en la fase terminal.
Son útiles desde el diagnóstico. Sin embargo, los cuidados al final de la vida se enfocan en las últimas etapas de la enfermedad, cuando el objetivo es el confort en lugar de la curación.
Cuidar de quienes cuidan en fundamental para aportar un servicio excelente y a medida. Las personas que cuidan enfrentan el estrés y la carga emocional de las pacientes. Y es por ello que el papel de la psicología es fundamental en el proceso de los cuidados paliativos. No debemos olvidar que al final son profesionales especializados en la gestión de situaciones difíciles que pesan sobre nuestra cabeza y afectan a nuestras emociones.
Profesionales de la psicología, al final, están ahí para ayudar a reducir el estrés, la ansiedad, la depresión y el miedo. Colaboran en el manejo de los síntomas psicológicos, como el insomnio, la fatiga emocional o la angustia, con el objetivo de seguir sumando al bienestar de la paciente.
Además, es la persona que está ahí para proporcional apoyo en situaciones de crisis emocional, como la aceptación del diagnóstico, el deterioro físico o los conflictos familiares que puedan surgir. Asimismo, ayuda a lidiar con decisiones difíciles, como el cambio en los tratamientos o la planificación de cuidados al final de la vida, promoviendo la reflexión sobre los valores y deseos de la persona.
Las disciplinas que colaboran con los cuidados paliativos contribuyen al manejo integral del sufrimiento, no solo del dolor físico, sino también del malestar emocional, psicológico y existencial. Son una fuente de valores y conocimientos, con mucho corazón, que ayudan a crear una experiencia de final de vida más digna y llevadera. Son ese broche que permite que nuestro final, sea un poquito más feliz.